En el Tribunal Penal 1 de Pergamino comenzó la parte de audiencias orales y públicas para dirimir las responsabilidades de los cinco imputados en la muerte de Beatriz Uboldi Vda de Parigini. La mujer de 82 años fue asesinada en ocasión de robo en su casa de calle Almafuerte 230, en abril de 2006.
La investigación y el proceso judicial recorrieron varios trayectos tortuosos. La incidencia del apellido Parigini en la familia judicial nicoleña obligó llevar el juicio a otra jurisdicción.
En aquella madrugada fatídica, dos o más personas ingresaron a la vivienda de la venerable mujer que estaba al cuidado de otra, a quienes maniataron, y en el caso de Beatriz la golpearon. A poco de conocerse que el deceso se produjo por asfixia, y que no había botín robado, se desataron una serie de hipótesis. Algunas de las cuales se ventilarán en el juicio.
En la primera jornada, declararon ocho testigos, y la nómina se irá acrecentando según pasen las jornadas de debate. Los primero testimonios escuchados, pertenecen a las primeras personas que llegaron al lugar luego que la dama de compañía pidiera auxilio al hijo de su patrona, en la casa vecina.
Por este hecho están imputados: Roberto “Gancho” Peralta, Gerardo “Mono” Díaz, Jonathan Paredes, Delia Méndez, y Sandra Troyas. Algunos como ejecutores del intento de robo y posterior homicidio, y otros con distintos grados de participación y encubrimiento.
Foto: Frente de la casa donde se produjo el hecho.