A partir de ahora se llama “Rosario Vera Peñaloza”. El jardincito conocido como “el de barrio Matadero”, lleva orgulloso ahora el nombre la primera maestra jardinera. La determinación la tomó la comunidad educativa hace tres años por el voto de la mayoría de los que participaron de esa asamblea.
En el acto, que se llevó a cabo días atrás, contó con la presencia de los más queridos y ausencias institucionales que se perdieron la fiesta organizada por las maestras y de la que fueron protagonistas los chicos.
En el discurso de rigor la Directora del Jardín Rosario Vera Peñaloza, Graciela Sarrú, dijo que “en el marco de los festejos del Bicentenario es un honor para nuestra comunidad educativa llevar a cabo este acto de imposición de nombre, ya que es una oportunidad para repensar sobre nuestra identidad y valorizar nuestra historia y la de nuestro nivel inicial”.
En una breve síntesis de la vida de la “Maestra de la Patria”, la directora hizo un parangón con el proyecto institucional del jardincito. “el nombre de Rosario Vera Peñaloza nos identifica, porque este jardín surgió de un sueño de un grupo de docentes y creció gracias al compromiso y dedicación de otro grupo de docentes que no dudaron al igual que Rosario de darse a la educación sin esperar recompensas y en capacitarse para brindarles calidad educativa e igualdad de oportunidades”.
Después del descubrimiento de la placa y la bendición de las instalaciones, lo mejor quedó para los números que se presentaron para quienes se dieron cita a tan emotiva fiesta.
Foto 1: Las autoridades educativas presentes descubren la placa con el nombre.
Foto 2: El izamiento del Pabellón Nacional abrió la ceremonia en el alejado paraje.
Foto 3: El cuerpo de docentes se esmera en darle lo mejor a los chicos que allí concurren.