La última noche del Ciclo de Cine Latinoamericano auspiciado por Ternium Siderar tuvo una espectacular convocatoria de público. Colmaron las sillas y ocuparon todo espacio disponible del Paseo Costanero para ver “Un cuento chino”. Respuesta efectiva a una propuesta cultural interesante, con entrada libre y gratuita.
Durante las tres noches que duró el ciclo, en un renovado formato y volviendo al escenario que lo vio nacer, el aporte de la Fundación Proa fue acertado para que los nicoleños disfrutaran de buenos filmes. En el marco del Ciclo Cultural de Verano, organizado por la Dirección de Cultura de la Municipalidad de San Nicolás, la Asociación Cultural Rumbo acompañó la proyección de cortos locales. Resultaron del agrado de quienes se dieron cita a una función de cine popular, pero con medios técnicos que hicieron impecables las proyecciones.
El cierre fue con el multipremiado filme de Sebastián Borensztein y que protagonizó, entre otros, Ricardo Darín, “Un cuento chino”. La proyección del corto “Muerto sin dueño” permitió que entre el público se reconocieran a los actores que participaron de la historia que dirigió Nicolás Ballistreri.
En cuanto a lo general, será un detalle las condiciones del tiempo que pudieron haber alejado un poco a la gente de la ribera del río. La respuesta fue positiva el domingo, y la complacencia por la película y la calidad de su proyección suple cualquier suéter o campera para pasar el frío ambiental, y a veces el destemplado espíritu cultural.
Este sábado se llevó a cabo la Megafiesta Ternium