De acuerdo con estadísticas del ICBA, Instituto Cardiovascular Buenos Aires, entre los 35 y 50 años hay una mayor incidencia de infartos.
Para evitarlos debemos llevar adelante una rutina de ejercicios para que nuestro cuerpo no se afecte.
Caminar, bailar, correr, andar en bicicleta, remar, hacer fierros, etc, etc, son muchísimas las formas de hacer un poco de actividad física.
Bajar de peso, colesterol, diabetes, presión arterial o el estrés, son modificables o controlables, valga la redundancia: ¿Los tenés controlados?
Y le recuerdo a los oficinistas: pequeños ejercicios, grandes beneficios
El sedentarismo es uno de los factores de riesgo modificables de mayor prevalencia en la población mundial.
Existe un creciente consenso mundial acerca de que los hábitos de vida sedentarios llevan a limitaciones funcionales y al incremento del riesgo de aparición de enfermedades cardiovasculares , cáncer, obesidad y diabetes.
No es necesario ser un atleta para “incorporar” actividad física. Bajarse unas cuadras antes del colectivo o estacionar el auto un par de cuadras lejos de la oficina para caminar y subir por escalera en lugar de usar el ascensor, son algunas de las “claves”.
* Aún 30 minutos de ejercicio moderado cada día te ayudará a:
Reducir el riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular.
Mantener su peso bajo control.
Reducir el nivel de colesterol.
Prevenir y controlar la presión arterial alta.
Aumentar el nivel de energía y sentirse más fuerte.
Reducir el estrés y la tensión.
Y vos, ¿te ocupás de tu salud? ¿hacés algo por tu cuerpo?. Para la próxima les cuento una rutina completa para entrenar sin salir de casa.