En la madrugada del domingo se efectivizó un control vehicular y de personas en el acceso Perón. Participaron funcionarios municipales, policiales y gendarmes. Se secuestraron una treintena de motos, y se labraron una cantidad similar de actas de constatación. Se individualizó a menores embriagados.
La subsecretaría de Ordenamiento Urbano coordinó las tareas de un operativo de control vehicular e individualización de personas, que se extendió durante varias horas de la madrugada en acceso Perón.
La continuidad de este tipo de controles permite evaluar los resultados de las tareas de prevención que se realizan en los mismos. Por un lado se redujo ostensiblemente la cantidad de detecciones de alcoholemia en sangre entre los conductores, mientras que por otro lado se continúa con el secuestro de motos.
Sobre las detecciones el titular del área municipal, Rodolfo Fernández Viña, indicó que no hubo conductores que hayan violado los límites que impone la Ley de Tránsito, “y eso manifiesta que hay una mayor toma de conciencia sobre uno mismo, sobre los que van en el automóvil y sobre el otro que circula en la calle”. Y agregó, “no así entre los motociclistas, que siguen circulando sin casco, sin la documentación obligatoria, sin patente”. En total fueron unas treinta las motos secuestradas.
En cuanto a los automóviles se labraron algunas actas de constatación pero no hubo secuestros.
También se detectó entre las personas individualizadas, menores de edad en evidente estado de ebriedad, que habrían estado compartiendo lugares de expansión nocturna junto con mayores.
Los funcionarios municipales y de las fuerzas de seguridad no tomaron ningún temperamento sobre esta situación, que será evaluada con controles más específicos próximamente.