La Jueza de Garantías 1, Dra. Laura Vázquez, habría dictado un recurso a favor de la familia Ponte y ordenado la detención de la obra de saneamiento de Villa Tranquila. Mientras fuentes judiciales afirmaban el decisorio, desde el municipio se desconocía el tenor del mismo.
La Municipalidad de San Nicolás inició el saneamiento de un sector aledaño del Santuario Diocesano y la apertura de calle Guardia Nacional hasta Bustamante. Esto en el marco de un proyecto de ampliación del circuito costanero uniendo los dos paseos y el Parque Perón.
El Concejo Deliberante le dio la utilidad pública al proyecto para proceder con la expropiación de terrenos.
Mientras tanto se presentó un particular haciendo valer sus derechos de propiedad y exigiendo parar la obra.
De hecho lo hizo físicamente dificultando el trabajo de las máquinas viales, cuestión que tuvo que zanjar la policía en el mismo lugar.
El municipio informó que la situación era motivo de estudio para determinar fehacientemente quienes eran los propietarios de los terrenos en cuestión, que tenían una deuda superior a los 600 mil pesos en tasas y mejoras.
Los vecinos apoyan el saneamiento del lugar y la apertura de calle Guardia Nacional y celebraron la pavimentación de calle Bustamante. Mientras tanto siguen en conversaciones para buscar una urbanización integral del asentamiento irregular o la relocalización de las familias que accederían a esta cuestión.
Fueron estas familias las que alertaron que la Jueza de Garantías 1 Laura Vázquez habría ordenado el cese de las tareas hasta tanto o se definan las cuestiones que presentó el señor Fernando Ponte ante el fiscal Darío Giagnorio.
Mientras fuentes judiciales aseveraba la versión, desde el municipio se informó que no se había recibido notificación alguna y se continuaba con el ritmo de trabajo para completar la obra.
Acerca del futuro de ese sector de la ciudad se indicó que se proyectó ser recuperado para el uso de todos los nicoleños y peregrinos. Y que se esperaba que no hubiera trabas en la Justicia que impidieran el progreso de la ciudad por los antojos de unos pocos que no estuvieron nunca presentes y ahora reclaman derechos cuando la Municipalidad mejora el lugar.
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