El hombre que tenía 76 años fue atacado presuntamente en ocasión de robo. Recibió más de un golpe y fueron fatales para el ex panadero. La fiscal Sandra Bicetti hizo una inspección del lugar y de los primeros testimonios y el resultado de la autopsia ordenó la detención de un empleado de la panadería.
Carmelo Compierchio de 76 años fue hallado muerto en su casa de calle Juan B Justo 531.
Lo encontraron empleados de la panadería y una doméstica aproximadamente a las 7:00 de este jueves.
De inmediato dieron aviso a la policía y familiares de la víctima.
La titular de la fiscalía 10, Dra. Sandra Bicetti, realizó una inspección en el lugar y constató la rotura de los vidrios de dos aberturas. El hombre se encontraba tendido en el piso con un profundo corte en la cabeza.
Posteriormente se determinó que el deceso se produjo por un traumatismo cráneo encefálico, producto de al menos un golpe con un objeto contundente.
Personal de la DDI y Científica trabajaron en el lugar en procura de sumar elementos a la investigación.
Las primeras testimoniales se aproximaron a la ausencia de un empleado de la panadería que funciona en la planta baja de la casa del occiso.
El hombre de 30 no se presentó a trabajar en este día, y en un allanamiento en su vivienda se secuestraron elementos de interés para la investigación.
El sujeto fue aprehendido y revisado por médico de policía para determinar las heridas que tenía en el cuerpo que no fueron precisadas. Tiene antecedentes penales por robo y estaba bajo libertad condicional.
En las próximas horas comparecerá ante la fiscal.
La Dra. Bicetti indicó a EL INFORMANTE que se están analizando todos los elementos que se van sumando a la causa para llegar al esclarecimiento de un homicidio.
Sobre la posibilidad de que haya sido en ocasión de robo la fiscal indicó que sólo se supo el faltante de un arma de fuego. La funcionaria judicial inspeccionó el lugar y pidió las pericias a dos ventanas, una de la planta alta y otra de un acceso interior a la vivienda, que se encontraban rotas.
Compierchio fue propietario de la panadería que funcionaba en la planta baja de su casa y que ahora explota un tercero. Su vivienda se encuentra en el primer piso y tenía acceso desde la cuadra de la panadería.
La fiscal no aventuró ninguna hipótesis y sostuvo que la muerte se produjo por un certero golpe en la cabeza, de algunos otros que fueron dados con un objeto contundente. El deceso se calcula en las primeras horas de este jueves. Los detalles de la autopsia se conocerán más adelante.
El allanamiento solicitado y la detención fueron posteriores a descartar un accidente doméstico como se especuló en un primer momento.
El hombre aprehendido, de unos 30 años, es empleado de la panadería y no se presentó a trabajar. Las sospechas fueron más firmes cuando no pudo explicar las heridas que presentaba en su cuerpo.