A nuestro criterio, los gobiernos no comienzan al momento de asumir, sean municipales, provinciales o nacionales. Comienzan desde la vocación de servicio en las campañas, en la construcción de una nueva política. Las inquietudes aportadas por cada vecino, las recorridas habituales, el contacto con la realidad; es lo que permite estructurar una ALTERNATIVA ORDENADA, una alternativa PREPARADA y EFECTIVA, destinada a resolver todas las problemáticas: presentes y futuras. Esta alternativa la personifica por antonomasia el PRO, manifiesto de corrección, desarrollo y gestión.
¿Es esto un simple de parafraseo electoral sin respaldo? No. El trabajo es el principal pilar de la campaña PRO, siendo nuestras propuestas las conclusiones del mismo. Y sin titubear decimos, que cuando seamos gobierno nuestras propuestas constituirán en POLITICAS DE ESTADO TRASNFORMADORAS. Así como Mauricio lo hará desde la Nación, Maria Eugenia desde la Provincia, el Municipio no desoirá el escenario de cambio y superación de las manos de Adolfo Suarez Erdaire.
Durante esta semana, como la mayoría de ellas, estuvimos en contacto con el vecino, para aprender juntos, como construir una mejor ciudad. Desde Barrio Moreno, Los Fresnos, Autopista; hasta la 12 de Marzo, IVBA, e incluso la habitual presencia en delegaciones como La Emilia o Conesa. No le escapamos ni tampoco ignoramos realidades, todos somos parte de la ciudad y todos merecemos un MUNICIPIO PRESENTE. Y ese nuevo municipio solo será posible escuchando a la gente.
Es crítica la presencia de basurales en diversos barrios, asombrando el aval cultural por parte de los agentes naturales. La calidad de vida, en lo que compete a las funciones de la municipalidad, no puede dar respuestas de una manera en ciertas zonas, y desoída en otras. Debe haber una política activa de concientizacion sobre el correcto tratamiento de la basura, desde el gobierno hacia la ciudadanía. Política que no se agota en simples gestiones aisladas o en un merchandising de temporada. La seriedad que exige nuestro partido, nos llama a:
1) Erradicar los puntos de concentración residuales (basurales): proveyendo capachos comunitarios o similares en TODA LA CIUDAD, verificando el correcto funcionamiento del servicio de recolección, el respeto de las frecuencias, la optimización de las mismas, y de ser necesario, sancionando a quien incurra (luego de proveer todas las herramientas para la correcta gestión de la basura) en ensuciar irresponsablemente la ciudad.
2) Mantener una política activa en el manejo de los residuos: habilitar centros de reciclaje (no quedarnos en políticas aisladas), promover la clasificación de residuos, informar y formar sobre la importancia de los mismos.
3) Trabajar mediante la Subsecretaria de Medio Ambiente estas cuestiones, promoviendo la “cultura verde”, por un mejoramiento en los estándares de vida.
No es un proceso de corto plazo, pero con una correcta puesta en acción, se pueden empezar a ver resultados de manera inmediata. Es alarmante, que el dispensario del Barrio 7 de Septiembre, se haya convertido en un área basural. Cuando la salud, el medio ambiente, y la calidad de vida están en juego, el municipio debe estar siempre presente.
La ausencia municipal, no solo se presenta en materia de basurales y salud. Más allá de los notorios y habituales problemas en el ORDENAMIENTO AUTOMOTRIZ, hemos sido testigos del desorden en los barrios aledaños a la ruta 188. La discusión de que si corresponde su ordenamiento al municipio, o el estado nacional, solo promueve la postergación de las necesidades de nuestros vecinos. Se deben tomar cartas en el asunto para la seguridad de quienes viven en las inmediaciones y por los mismos transeúntes de la ruta. Desde el PRO, ordenaremos el flujo de transito en los puentes, ensancharemos la 188 a la vera de las calles colectoras, procuraremos que este correctamente remarcada, con sus carteles restaurados, y algo no menor: Iluminaremos y desmalezaremos los terrenos lindantes. Una política efectiva, no solo se hace de obra pública, sino del compromiso del municipio para obtener los resultados necesarios, un ORDEN a largo plazo.
Y en este ordenamiento, no solo hay que cumplir con lo inmediato, respecto a las competencias clásicas de una intendencia. La calidad de vida no solo se concreta con políticas urbanas, sino con oportunidades. Construiremos una San Nicolás floreciente, como también lo será el país, mediante una correcta política económica. Trabajaremos por la radicación de empleo en la ciudad. ¿Cómo se hace esto? Desde la postulación y ejecución de estos ejes:
1) Concretando ciertamente el parque industrial
2) Brindando beneficios impositivos, por plazos considerables, para permitir la amortización de la inversión por parte de privados.
3) Generar políticas activas de Crédito (blando y accesible) desde el Municipio.
4) Favorecer la creación de Cooperativas de Trabajo emergentes, en diferentes puntos de la ciudad.
Con seguridad jurídica se afianza la calidad institucional hacia los privados, se traduce en mayor empleo genuino, mayor consumo y mayor superávit fiscal. Al haber más ingreso de divisas al tributo municipal, hay solvencia estatal, y pueden evitarse “impuestazos” o “acosos” a quien se encuentre en mora. Ante todo, debemos ser servidores públicos, sinónimo de solución y no de problemas para el vecino. Todo es parte de un ciclo que será efectivo SOLO CON UN ESTADO PRESENTE, ORDENADO, SERIO y EFICAZ.