Sujetos ignorados robaron una cantidad importante de psicotrópicos de la farmacia de Savio 124. Los ladrones ingresaron por los techos y fueron directamente a la mercancía sustraída, retirándose por el mismo lugar que entraron. La farmacia Porta fue blanco de quienes sabían lo que buscaban. Las seguridades de los cerramientos y los ingresos impidieron por esos lugares la huida, con lo que hubieran engrosado el botín.