En el marco de un operativo de tránsito y transporte realizado el pasado 9 de julio, un remisero terminó siendo multado por el Juzgado de Faltas. No llevaba pasajeros.
Al conductor se lo invitó a detener la marcha y al realizársele el examen de alcoholemia se verificó que manejaba alcoholizado con un nivel de 0.78 de alcohol en sangre.
Por este motivo, se le labraron actuaciones por alcoholemia positiva.
El Juez de faltas Dr. Martin Brignoli lo sancionó con el pago de una multa de $4500 y la suspensión de su licencia de conducir por un plazo de un año, por lo que esta persona no podrá manejar ni trabajar en dicho plazo.
El funcionario municipal señaló que “continúan las condenas ejemplares a los infractores que no sólo realizan inconductas que ponen en riesgo su propia vida sino también quienes no demuestran interés por la vida de terceros inocentes en peligro por su actuar”.