El Dr. Pablo Del Litto, máximo referente del PRO en San Nicolás, formuló declaraciones críticas sobre el "incongruente funcionamiento" del Cuerpo. "Los nicoleños debemos pagar el costo institucional de tener un Concejo Deliberante alineado al Ejecutivo y “artificialmente” logrado, ya que esa no ha sido la composición que la ciudadanía votó en los comicios de 2005 y 2007", dijo Del Litto.
El referente del partido de Mauricio Macri, asegura: "Dejando de lado los métodos de cooptación y los intereses que provocaron este “reacomodamiento” político del Concejo Deliberante local, no puede soslayarse que esta Institución Legislativa ha quedado gravemente devaluada ante la sociedad, y esto no es un dato menor o meramente anecdótico.
Precisamente la Institución que dicta las normas de alcance local, que impone conductas a los ciudadanos, viene exhibiendo un funcionamiento incongruente con ese fin.
Seguramente no todos sus miembros son responsables de esta situación, y probablemente existan también responsables externos del cuerpo legislativo, pero lo cierto es que el Cuerpo como entidad se ve afectado".
Además menciona como un ejemplo que refleja la conducta que critica, asegurando que "el debate sobre el aumento de las tasas municipales, allá por diciembre de 2007, marcó el fin de un ciclo obstruccionista y para nada constructivo del Concejo Deliberante de San Nicolás, para iniciar, lo que en ese momento parecía, un nuevo ciclo de principios, de exposición de fundamentos, de profundización en el estudio de la situación a resolver, que brindaba esperanzas de retomar el camino correcto.
Pero poco duró este estado de cosas, porque de inmediato, se omitió tratar la rendición de cuentas del ejecutivo; a sólo siete meses, los fundamentos vertidos y las posiciones sustentadas en diciembre en relación a las tasas fueron abandonadas por un grupo de concejales, aprobando un nuevo aumento en contra de sus propias posturas anteriores; el Concejo fue requerido recientemente por el Tribunal de Cuentas por irregularidades en el tratamiento de nada menos que la Rendición de Cuentas Municipal; y ahora se suma el fuerte cuestionamiento ético y jurídico que enfrenta el Presidente del Cuerpo Deliberativo por percibir una jubilación por invalidez y la dieta de concejal simultáneamente".
"A esto llegamos como corolario de los artificios ejecutados para que el Ejecutivo tenga mayoría propia, circunstancia que con las urnas no había podido alcanzar.
Esta borocotización, sumada a los desaires reseñados, afectan sustancialmente la Institucionalidad del Organo que tiene la función de dictar las normas que debemos cumplir todos los nicoleños.
La incógnita es hasta qué punto se va a insistir en estas prácticas perjudiciales para las instituciones. No les parece que llegó el momento de “bajar un cambio”?
Hay que retomar el camino del debate constructivo, de los amplios consensos, y escuchar las demandas de los ciudadanos, para devolver a nuestro Concejo Deliberante la honorabilidad que se declama en su nombre y el prestigio que exige su autoridad en materia legislativa", concluye el Dr. Pablo Del Litto.