La ministra de Salud bonaerense, Zulma Ortiz, enfatizó hoy la necesidad de que las embarazadas se vacunen en cualquier trimestre del embarazo contra la gripe, y dijo que esa inmunización está disponible y es gratis en los 1.768 vacunatorios públicos. “Este año queremos reforzar, sobre todo, la importancia de la vacunación antigripal en el embarazo”.
Las embarazadas constituyen uno de los grupos más vulnerables frente a la gripe. De hecho, recordó Ortiz, cuando se registró la pandemia de gripe A H1N1, en 2009 – momento en que aún no había vacuna disponible contra esa variante del virus influenza-, “se registraron 29 muertes de mujeres embarazadas por gripe”.
Este año, la formulación de la vacuna dispuesta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el hemisferio sur está compuesta por las cepas A H1N1, H3N2 e Influenza B.
Ortiz señaló que “existe cierta resistencia a recomendar la vacunación a embarazadas, sin embargo, es la mejor forma de protegerlas de complicaciones”. En ese sentido, apeló a la responsabilidad de toda la comunidad: “Les pedimos a todas las personas que cuando estén con una embarazada le pregunten si se vacunó contra la gripe y le recomienden hacerlo porque, como dice la gobernadora María Eugenia Vidal, vacunarnos es cuidarnos entre todos”.
Por otra parte, agregó que por lo general “el pico de casos de gripe se espera para la primera semana de julio”. Los especialistas recomiendan no demorar la inmunización, porque desde que la vacuna se aplica hasta que el organismo desarrolla las defensas necesarias para evitar cuadros graves de la enfermedad suelen pasar entre 10 y 15 días.
Desde la cartera sanitaria detallaron que las mujeres que no se hayan vacunado en el embarazo, deberán hacerlo luego de dar a luz, hasta diez días después del parto.
Las personas que deben aplicarse la vacuna contra la gripe todos los años son los que tienen más riesgo de sufrir complicaciones respiratorias a raíz del virus y fallecer por esa enfermedad. Entre ellos, además de las embarazadas, figuran el personal de salud, los niños de entre 6 y 24 meses de edad y las personas de entre 2 y 64 años inclusive con factores de riesgo, como enfermedades cardiacas, respiratorias o renales crónicas, inmunosuprimidos, diabetes y obesidad y todas las personas de 65 años y más.
Diversos reportes epidemiológicos internacionales indican que, en lo que va de 2016, la cepa A H1N1 de la gripe – que produjo cientos de internaciones y muertes en 2009-, regresó con fuerza al Cono Sur. Por lo tanto, las autoridades sanitarias insisten en que, además de la vacunación, el lavado de manos con agua y jabón al regresar al hogar, estornudar en el pliegue del codo, consultar tempranamente ante síntomas gripales, ventilar los hogares y lugares concurridos y el aislamiento domiciliario en caso de estar enfermo, también contribuyen a la prevención.
CAMPAÑA ANUAL
La ministra Ortiz explicó también, que la vacunación antigripal forma parte del Plan Anual de Vacunación que puso en marcha el gobierno de la Provincia de Buenos Aires tras conocer las bajas coberturas que registraba la población bonaerense.
“En algunos grupos de edad no se había llegado a vacunar ni al 70 por ciento de la población objetivo, cuando lo adecuado para no correr riesgos es llegar al 95 por ciento”, precisó Ortiz.
Por eso, hace poco más de un mes se inició la primera etapa del plan, que convocó especialmente a niños y niñas de 5, 6 y 11 años y a las embarazadas. En los primeros 30 días, se aplicaron más de 130 mil dosis de diferentes vacunas indicadas en el Calendario Nacional para esos grupos de edad.
La Provincia continuará con el plan todo el año en los 1.768 vacunatorios públicos. Pero también, según informó la titular de la cartera sanitaria provincial, está previsto un “barrido” para el segundo semestre del año, que incluye un trabajo en los distritos con mayor necesidad de cobertura. Para ese momento, se dispondrá de vacunadores que irán casa por casa.
¿Quiénes deben vacunarse?
Embarazadas en cualquier trimestre de la gestación, si la madre no se vacunó durante el embarazo, debe hacerlo al salir de la maternidad.
Niños de entre 6 y 24 meses de edad.
Personas con factores de riesgo, como enfermedades cardiacas, respiratorias o renales crónicas, inmunodepresión, diabetes, obesidad, enfermedades oncológicas y VIH.
Personas mayores de 65 años.
Personal de salud.
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