Se disputó la última jornada de los torneos Apertura "Gimnasio Segundo Tiempo". Se jugaron las finales con Regatas y Belgrano consagrándose en damas, y caballeros, respectivamente.
Así, Regatas es bicampeón y Belgrano tricampeón al conseguir ganar en el partido definitorio, ambos de manera merecida.
El gimnasio del centro familiar y deportivo Don Bosco fue escenario principal para el desarrollo de las finales del torneo Apertura. Un marco de público extraordinario, con más de 500 personas presenciando los partidos definitorios, le dieron un contexto perfecto a una jornada histórica del balonmano local y regional.
Más de 500 personas, 4 equipos disputandose un trofeo y ningún policía. Un comportamiento perfecto del público permitió que esta fiesta del handball se desarrolle de gran manera.
Final- Damas:
Regatas se puso en ventaja ni bien iniciado el juego, y hasta el final no dejaría de estar al frente en el marcador, si bien en algún pasaje del primer tiempo Don Bosco llegó al empate. Una muy buena tarea en el plano defensivo le dio nuevamente a Regatas la solidez y la confianza necesaria para comenzar a encarar el partido. Sumado a eso, su efectividad en ataque con jugadoras claves como Jennifer Geoghegan (goleadora del partido, 9 goles) y Victoria Ferrari (figura del juego y 6 goles) comenzaban a encaminar el triunfo. Don Bosco, impreciso y con errores que no suelen aparecer en el equipo de Omar Allegri, no encontraba las formas.
El mejor momento de las locales fue promediando los 20 del primer tiempo cuando luego de un minuto pedido por su dt, lograron igualar el marcador. Allí fue el punto de inflección del partido, pidió minuto Axel Ardanza y sus jugadoras volvieron a la cancha, se pusieron en ventaja y no volvieron a dar ventajas en el marcador. El primer tiemmpo finalizó con Regatas ganando 12 a 11. En la segunda etapa, el paso de los minutos incrementaba la diferencia conseguida por las de azul-naranja que jugaron un gran partido y consiguieron ganar 29 a 26. Las variantes implementadas por Don Bosco a lo largo del juego no le dieron resultado para tener posibilidades de dar vuelta el partido. La goleadora del encuentro fue Sofia Dziewa con 13 tantos. Regatas festejó y demostró porque es el mejor por segundo torneo consecutivo.
Don Bosco falló en los momentos decisivos, mostró flaquezas en sus últimas presentaciones y en el partido definitorio se encontró con un rival superior en el juego colectivo. A pesar de esto, las del centro familiar deben ser conscientes del gran torneo realizado y pensar en que una vez más, como nos tienen acostumbrados, fueron protagonistas de una definición en rama femenina.
Por su parte, Regatas en una clara curva ascendente en su rendimiento con pico máximo en los últimos partidos del certamen, demostró el gran trabajo que viene llevando a cabo de la mano de Axel Ardanza. Ya no es el equipo disperso de algunos torneos atrás, todo lo contrario. Hoy Regatas muestra pocos momentos de distracción en los partidos, trabaja muy bien colectivamente y tiene en Victoria Ferrari un factor clave, con entrega, madurez (a pesar de su corta edad), capaz de ponerse el equipo al hombro en momentos difíciles y sobre todo, amor por los colores. Salud, salud campeonas.
Final- Caballeros:
Intensidad y concentración fueron los factores más importantes de Belgrano para lograr vencer a Somisa. Desde el primer minuto "el rojo" mostró como jugaría el partido. La final fue lo que se esperaba, un partido muy parejo, donde el que se dejaba llevar por las sensaciones y la tensión iba a salir perjudicado, y en donde lo más importante sería el trabajo defensivo, fundamental en esta instancia y ante rivales tan poderosos. En los primeros minutos ambos desnudaron sus intenciones en defensa, Belgrano no dejar jugar a Martín Rafart y Lautaron Nastta; Somisa, hacer lo propio con Gonzalo Hernández y Agustín Flores. La diferencia en el primer tiempo la pudo sacar el elenco dirigido por Blas Toloza, porque supo encontrar el camino por medio de Agustín Moreno, figura del partido. El equipo "del barrio", no encontró solución al planteo defensivo de su rival, y se fue al descanso en desventaja de 16 a 13.
Belgrano era superior, o por lo menos más inteligente para encontrar la forma de lastimar en ataque. Pero la final se guardaba sus minutos más dramáticos y apasionantes para la segunda etapa. Somisa con el paso de los minutos fue tomando confianza y encontrando los caminos con mejor labor defensiva. Ante esto, Belgrano entró en 15 que casi fueron fatales porque perdió muchas pelotas, tuvo muchos errores y permitió que los de Caludio Lovera, por mérito propio, lleguen al empate y a pasar al frente cuando quedaban 14 para el cierre del partido. Desde ese 18 iguales, durante 10 las emociones fueron intensas ya que se mantenían gol a gol y no lograban sacarse ventaja. Pero apareció la jerarquía. la experiencia, o la viveza (como usted quiera llamarlo) de Belgrano.
Restaban 3 30" en el tablero y Belgrano ganaba por dos, pero Joaquin Oviedo veía la roja (otra vez, como en el primer enfrentamiento del año entre ambos), y todo parecía complicarse para los de Pellegrini. Era el momento de Somisa para aprovechar la superioridad numérica y llegar al empate, pero infantilmente Facundo Nastta se hizo expulsar y Belgrano encaminó su victoria. Mantuvo la diferencia de dos goles a favor y se llevó la final por 25 a 23.
Cabe destacar el gran torneo de Somisa, que si bien es subcampeón y no logra el objetivo de levantar la copa para cortar con la supremacía de Belgrano, supo ganarle durante el certamen para finalizar líder la primera fase. Estuvo a la altura de las circunstancias y brindó un gran espectáculo desde el primero, hasta el último partido del semestre. Demostró ser un gran equipo, que sólo deberá atar algunos cabos para poder consagrarse a futuro.
Belgrano festejó el tricampeonato, levanta el trofeo por tercera vez consecutiva marcando una tendencia en el balonmano masculino de la región. Pero más allá de este logro, con la cabeza en frío, los Gonzalo Hernández, Hernán Sciarresi y compañía, descansan tranquilos porque detrás de ellos asoma una camada de jóvenes que palparon el amor por este deporte, por la camiseta y la esencia del handball. Excelente torneo de Agustín Flores, Laureano Valdez, y actuación consagratoria de Agustín Moreno en la final.
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