Personal del Comando de Patrullas recuperó una moto que había sido robada y aprehendió al sospechoso del hecho. En la diligencia se enfrentaron a un grupo de personas que se mostraron hostiles. No hubo heridos.
Dos efectivos respondieron a un llamado del 101 Emergencias Policiales. El pedido de auxilio era de una mujer que denunció el robo de su moto.
Al llegar al lugar una joven manifestó que un sujeto con un arma de fuego le había robado la moto.
Señaló que el mismo estaba en las inmediaciones. Cuando los policías lo divisan lo siguen hasta una finca de Olleros al 700. Ante la presencia policial abandona la moto en la vereda y se pierde por los fondos.
En el lugar se identifican varias personas ninguna de las cuales se hace cargo del rodado.
Es por eso que la Motomel 110cc sin plásticos ni chapa patente es remitida a la comisaría Tercera.
Poco después una patrulla avista al sujeto al sospechoso que se fugó tras la persecución, el cual se desplazaba en una bicicleta. La policía lo sigue hasta el mismo lugar donde antes se les había perdido el rastro, pero esta vez logran aprehenderlo.
Mientras se realizaba la diligencia, el grupo de personas que se encontraban en el lugar se pusieron hostiles e intentaron liberar al sospechoso. Superados en número y para evitar mayores inconvenientes, los policías se retiran del lugar rápidamente.
En la sede de la comisaría Tercera se labran las actuaciones y quedó a disposición del fiscal en tuno un joven de 20 años domiciliado en barrio Santa Clara.
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