A raíz de rumores que circulan por redes sociales y cadenas de mensajes, sobre la presencia de extraños en actitudes sospechosas o el secuestro de jóvenes, el Jefe Departamental, comisario inspector Dante Paolini, desmintió cualquier indicio de realidad.
Una proliferación de mensajes temerarios advirtiendo sobre vehículos y personas en actitud sospechosa, o bien con afirmaciones de la desaparición de personas y otros similares, están circulando por los teléfonos de los nicoleños.
Sobre esta situación, que en algunos casos causa una sonrisa con sorna por lo descabellado de su contenido y en otras una innecesaria alarma, fue consultado por EL INFORMANTE el comisario inspector Dante Paolini. El Jefe Departamental tomó con seriedad la consulta, indicando que es necesario aclarar algunas cuestiones. Primero para llevar tranquilidad a la comunidad y después para poder desalentar estas maniobras que son motivo de investigación.
Paolini desestimó que haya en la jurisdicción de la Departamental ninguna desaparición de niños o denuncias de vehículos o personas sospechosas como se dicen en algunos lugares.
El jefe policial indicó que se trata de mitos urbanos, que reconoció recrudecen de vez en cuando y siendo algunos inofensivos, como las campañas para juntar dinero en una causa humanitaria, otras provocan temor y una innecesaria alarma social.
Particularmente se refirió como ejemplo a una que surgió en Rosario y llegó a nuestro medio. Se trata de la desaparición de menores, que fue investigada y se llegó a descubrir quiénes la inventaron y la divulgaron. Estas personas serán llevadas a la Justicia para que rindan cuenta de sus actos intimidatorios.
Paolini indicó que las comunicaciones y la internet permiten que los mensajes se multipliquen rápidamente y se pierda el origen, desvirtuando su intención en algunas oportunidades. Pero que los técnicos de la policía están en alerta sobre aquellos que utilizan estas herramientas tecnológicas para sembrar pánico o generar campañas con algún mezquino interés.
El funcionario policial recomendó a la población no multiplicar este tipo de mensajes, que tal vez se reciba de alguien de confianza, pero que no se puede comprobar su veracidad. “Me lo mandó una persona que conozco que se lo mandó un pariente…” y la cadena se hace interminable o por lo menos difícil de corroborar.
Se ha descubierto que una travesura, una broma de dudosa gracia, empiezan a circular y se transforma en un mensaje que genera temor.
La comunidad debe saber, concluyó Paolini, que la policía está atenta a investigar acciones sospechosas concretas, en el 101 Emergencias Policiales o en cada comisaría, cualquier actitud o acontecimiento anormal que la gente pueda testificar se puede denunciar. Porque eso es la prevención. Darle entidad a un mensaje que nos llega al teléfono, replicar por redes sociales advertencias sobre vehículos o personas no ayudan a la tranquilidad social. Es más contra producente que la buena voluntad de las personas que pretenden hacer un bien y no se dan cuenta que multiplican la conmoción.
Por eso recomendó Paolini, antes cualquier situación anormal, llamar al 101 Emergencias Policiales. Y si hubiere algún suceso de cualquier característica, los medios periodísticos serios lo van a informar como siempre ha sido por los canales que dispone la Jefatura Departamental.