Monseñor Hugo Norberto Santiago expresó en una conferencia de prensa sus sensaciones sobre su nueva tarea pastoral que asumirá el 11 de noviembre como obispo de San Nicolás de los Arroyos.
El prelado, santafesino de 62 años, quien hasta su nuevo nombramiento era obispo de Santo Tomé (Corrientes), fue elegido obispo de esta nueva diócesis por el papa Francisco, luego de que este aceptara la renuncia de Mons. Héctor Sabatino Cardelli como obispo de San Nicolás de los Arroyos, por haber cumplido 75 años.
Sentado junto al obispo saliente, Mons. Santiago aseguró tener “un estilo directo” al relacionarse con la gente y confirmó que sus primeras actividades consistirán en "visitas pastorales para conocer la diócesis y sus personas".
Vengo dispuesto a escuchar, a conocer, estoy muy contento de cumplir la voluntad de Dios”, afirmó y continuó: “Siempre estuve muy convencido de que la alegría viene en el cumplimiento de la voluntad de Dios así que si Él, a través del Papa, me pide esto, acá estará seguramente mi alegría”.
Asimismo, comentó que monseñor Cardelli se comprometió “a seguir ayudando”. “Estuvimos charlando la importancia de seguir colaborando ya que él tiene una gran experiencia de todos estos años y me va a servir a mí para ir despejando dudas; tiene mucho conocimiento de la gente que puede ser un gran bien para mí, estaré abierto a todos los colaboradores que él tenía y empezaré un camino de conocimiento”, detalló.
Territorialmente, la diócesis de San Nicolás de los Arroyos es menor que la diócesis de santo Tomé, pero en cuanto a densidad de población, San Nicolás es mucho más que el doble, según explicó el obispo. “Hay más gente, sacerdotes, parroquias, por lo tanto, evidentemente es una realidad más compleja que lleva tiempo conocer, por eso al principio da un poco de vértigo, pero siempre sabemos que lo que Dios nos encomienda nos sobrepasa y, por eso, es una oportunidad para decirle a Dios: ‘Encárgate de lo que me pediste’”, manifestó.
También, el prelado habló del santuario de San Nicolás y consideró “una gracia tener un santuario con una afluencia tan grande de gente”. Luego, planteó la necesidad de que los peregrinos estén bien atendidos, debido a la “gracia de conversión” que se concede allí al peregrino.
“Es bueno recibirlo con una buena cantidad de sacerdotes que confiesen”, aseveró. “Hay mucha gente que se acerca a Dios con motivo de peregrinar a la Virgen, por lo tanto, me parece que cuando viene tanta gente motivada por la Virgen, es importante estar ahí para acercarlos a Dios”, enfatizó.
Mons. Cardelli afirmó: “Vamos a trabajar en conjunto”
El obispo emérito de San Nicolás de los Arroyos, monseñor Héctor Cardelli, cuya renuncia por edad ya fue aceptada por el papa Francisco, afirmó: “Yo soñé muchas cosas que no he podido concretar, gracias a Dios la iglesia tiene la sucesión apostólica”.
“Vamos a trabajar en conjunto, yo lo voy a ayudar en lo que necesite y con mucho gusto”, puntualizó y compartió: “Hace 12 años que estoy aquí, forma parte de mi historia, no termina con mi jubilación, la Iglesia no se jubila. Así que me quedo con el compromiso de acompañar en lo que se necesite”.
“Hemos vivido armónicamente con la comunidad diocesana, el clero y el laicado. Siempre con la propuesta de seguir creciendo. Monseñor Santiago se encuentra con una diócesis sin divisiones”, aseguró.
Mons. Hugo Norberto Santiago
Nació en María Juana, provincia de Santa Fe, el 12 de abril de 1954. Fue ordenado sacerdote el 19 de diciembre de 1985 en María Juana, Santa Fe, por monseñor Héctor Romero, obispo de Rafaela, El 5 de diciembre de 2006 el papa Benedicto XVI lo eligió obispo de Santo Tomé, en la provincia de Corrientes. Fue ordenado obispo el 19 de marzo de 2007 en Rafaela, provincia de Santa Fe, por monseñor Carlos María Franzini, obispo de Rafaela, monseñor Jorge Casaretto, obispo de San Isidro y monseñor Francisco Polti, obispo de Santiago del Estero. Tomó posesión e inició su ministerio pastoral como cuarto obispo de Santo Tomé el 26 de marzo de 2007. En la Conferencia Episcopal es miembro de la Comisión de Pastoral Penitenciaria. Es licenciado en Teología Espiritual por el Pontificio Instituto de Espiritualidad “Teresianum”, de Roma. Su lema episcopal es: “Hágase” (fiat).
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