Un extraño suceso tuvo resolución cuando la policía logró la aprehensión de un menor, imputado de “Intento de Hurto”. El escenario del ingenioso ardid fue el supermercado Milenio de Savio y Cavalli. Personal de seguridad del mismo se percató de la extraña actitud de un joven, que se trasladaba entre las góndolas con un cochecito de bebé. Mientras distraía su atención en la comparación de los precios, con la otra mano cargaba el cochecito con artículos de singular valor. Luego de fingir la compra, se retiró del lugar sin sospechar que en la puerta lo esperaba el ejecutivo brazo de la Ley, que lo pescó infragante delito. El menor de edad sólo atinó a decir “No me detengan, llevo un bebé!”