Política
11/06/2019 - 23:26:45



Macri-Pichetto: la exposición de la fragilidad política de Cambiemos


La política argentina volvió a sacudirse, hasta los cimientos, este martes, cuando el presidente de la Nación, Ing. Mauricio Macri, a través de las redes sociales publicaba que su compañero de fórmula para la elección de este año sería el senador (FPV) Miguel Angel Pichetto. La noticia corrió como reguero de pólvora, Cambiemos y Mauricio Macri en especial ocupaban nuevamente el centro de la escena política nacional al anunciar que quien era hasta hace unas horas el presidente de la bancada opositora del Senado de la Nación se transformaba en aquel con quien Macri compartirá a suerte y verdad el resultado de las generales del próximo octubre.

El mismo Pichetto, que estaba trabajando hasta hace pocas semanas en la construcción de un espacio que buscaba romper la polarización existente entre el oficialismo y la propuesta del Kirchnerismo and friends, esa tercera vía a la que la sumatoria de egos de Lavagna, Urtubey, Massa y el mismo Pichetto condenaron a morir antes de nacer. Pero las cartas del macrismo están jugadas y el rionegrino, es una vez más oficialista.

El discurso acerca de la urgencia de la hora, de la batalla entre hambre y progreso, o entre institucionalización o chavización de la Argentina, ocupan, si se me permite la simplificación en función del medio, los argumentos elementales de unos discursos que a ambos lados de la grieta intentarán justificar los pases y las nuevas alianzas entre dirigentes que hasta hace pocas semanas eran blancos de sus críticas, una de las prácticas más repudiables de la vieja política vuelve a hacerse presente: el reciclado de dirigentes, se beben las aguas del Letes (aquel río mitológico del Hades) y el olvido generalizado entra en acción.

Los aparatos de propaganda se ocuparán de morigerar los dichos pasados desde y hacia el senador, y de presentar como un aliado cuasi natural, a quien es de hecho una visibilización del fracaso político de Cambiemos, pues la Alianza gobernante ha tenido que buscar fuera de sus filas, a un dirigente para acompañar a Macri, ha tenido que ampliar la coalición, y es claro que no es la alta popularidad la que los lleva a esta nueva jugada, sino más bien la desesperación de saberse empatado o perdiendo con una fórmula que representa al multiprocesado gobierno del 2003-2015, en eso sí Cambiemos ha logrado un récord.

La elección no parece, prima facie, feliz. Pichetto es un hombre de la rosca, también llamada por estas horas institucionalidad, pero de escasa o nula base territorial; es decir, los muchachos pichettistas se encontraron más eufóricos en Wall Street que en Villa Regina o Viedma; el nivel de votos que puede llegar a traccionar per se no sería tan significativo como el que ahuyenta, pues el senador ha tenido durante los últimos años una dura embestida contra los valores tradicionales sostenidos por las diversas confesiones, lo que lo vuelven una opción prácticamente indigerible para quienes profesan el cristianismo ( católicos, ortodoxos y evangélicos) , el islamismo y el judaísmo; la de Cambiemos se vuelve así una fórmula “verde”, que da una muestra más de desprecio a quienes formaron parte importante de su base electoral para llegar al poder en 2015 y a la que ahora pretende chantajear con ser la única opción al fantasma chavista.

Si bien resta ver cual es la jugada final de Massa que perdido en su laberinto se encuentra por ahora discutiendo una inendencia y un lugar en la lista de diputados, si no reacciona rápido habrá rifado gran parte de su capital político en la trampa que le tendieron Fernandez Fernandez. O si Gómez Centurión o Espert son capaces de atraer el voto desencantado de la centro derecha y potenciar un nuevo espacio opositor. Pero quizás para explicar nuestra realidad, haya que terminar recurriendo a los poetas, más que a los estudiosos, diremos entonces con Eurípides que “ sencillo es el relato de la verdad y no requiere además rebuscados comentarios; porque los hechos mismos le dan la oportunidad. En cambio, el discurso injusto, al ser enfermizo de por sí, necesita de sabios medicamentos”, y hoy agregaríamos, necesita un hashtag.

Lic. Sebastián E. Arias

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