Se trata de Valentina Avetta, nicoleña de 20 años y estudiante de bioingeniería en la UNER. Fue seleccionada por el programa JCI TOYP que homenajeará a los diez jóvenes destacados del mundo, menores de 40 años, durante el Congreso Mundial de la JCI 2019, que se celebrará en noviembre en Estonia.
Valentina fue elegida por desarrollar un sensor termocrómico que indica cuándo la insulina se ha vuelto defectuosa y trabaja para que sea accesible y económico para todos.
Ha sido ternada entre 40 personas de todo el mundo y ahora se encuentra en una etapa de votación pública para poder pasar a la final.
Para votar por ella, deben ingresar a este enlace: https://toyp.jci.cc/ hacer clic en su foto para ver su página individual y luego poner "Me gusta".
El programa reconoce a aquellos jóvenes que brindan un servicio extraordinario a sus comunidades. Ya sea a través del servicio, la innovación, la determinación o el pensamiento revolucionario, estos jóvenes ciudadanos activos crean impactos positivos a nivel local y global.
SOBRE VALENTINA AVETTA
Como diabética, Valentina Denise Avetta ha dependido de la insulina desde que tenía 12 años. Durante sus vacaciones familiares, pasó días sufriendo de niveles altos de azúcar en la sangre a pesar de tomar insulina. Más tarde descubrió que su insulina había estado por encima de los 30 ° C, causando que las inyecciones fueran defectuosas. Esta experiencia la llevó a investigar y desarrollar un sensor compuesto termocrómico que indica cuándo la insulina se ha vuelto defectuosa.
Con solo 15 años, estaba desarrollando una investigación y comenzó a experimentar con diferentes prototipos para su sensor de insulina. Presentó su investigación en ferias de ciencias y obtuvo la atención nacional de sus estudios, obteniendo una medalla de bronce en el Proyecto Internacional del Mundo Sostenible (Engineering Energy Environment) (ISWEEEP), una feria internacional de ciencias celebrada en Houston, EE. UU. Al año siguiente, Avetta recibió una beca para el Instituto Balseiro y ganó el primer lugar en la competencia Soluciones para el Futuro 2016 realizada por Samsung.
Después de dos años de proponer hipótesis y refutarlas con experimentación, se le ocurrió una nueva forma de desarrollar su prototipo utilizando cristales líquidos colestéricos. Desafortunadamente, los reactivos de estos cristales serían muy caros, lo que llevó a Avetta a su experimentación actual con geles termosensibles, dispositivos de microfluidos e impresión 3D. La esperanza de estudiar estas vías sobre los cristales líquidos es desarrollar un sensor de insulina que sea asequible y económico para todos.
Avetta continúa experimentando y desarrollando este sensor de insulina en la Universidad Nacional de Entre Ríos. Su dedicación y determinación para resolver este problema para la comunidad diabética ha inspirado avances creativos en el mundo médico para mejor.