Desde Ternium se siguen apoyando los proyectos de conservación de especies y de sustentabilidad social que impulsa Fundación Rewilding Argentina. En esta nueva etapa, la empresa contribuyó con más de 14 toneladas de acero para la infraestructura de dos ambiciosos proyectos: la reintroducción de la nutria gigante en el Iberá y la promoción del emprendimiento local para familias de El Impenetrable chaqueño.
La ausencia de predadores tope en el Iberá, tales como el yaguareté y la nutria gigante, implica un desbalance en el ecosistema, al perderse sus roles como reguladores de las poblaciones de presas. La principal misión de Fundación Rewilding Argentina es la reintroducción de estas dos especies en la región.
Desde 2011, Ternium, Tenaris y Tecpetrol han contribuido al esfuerzo de múltiples actores públicos y privados aportando tubos, chapa galvanizada y transporte para los objetivos de restauración y conservación de ecosistemas y especies que lleva adelante la Fundación. El proyecto de los Esteros del Iberá ya permitió liberar los primeros ejemplares de yaguareté y fue seleccionado por National Geographic como uno de los siete mejores modelos de conservación ambiental en todo el mundo
El acero de Ternium, clave para construir corrales en el Centro de Reintroducción del Yaguareté en los Esteros del Iberá y para obras en El Impenetrable chaqueño, ahora también cumplirá un rol esencial para la reintroducción de la nutria gigante y para la promoción del emprendimiento local, gracias a un nuevo aporte de 14.340 kilos de tubos, perfiles y chapas.
La nutria gigante es la especie de nutria más grande del mundo, pudiendo alcanzar una longitud de hasta 1,8 metros. Fue la depredadora tope de los ecosistemas acuáticos de Corrientes, alimentándose de peces y yacarés. Hasta mediados del siglo XX era posible verla en el río Paraná, cerca de la capital de la provincia. Esta especie está críticamente amenazada en la mayoría de los países donde se distribuye, e incluso considerada probablemente extinta en toda la Argentina. Es probable que una combinación de factores, incluyendo la modificación del hábitat, la contaminación, la caza furtiva y los conflictos con humanos hayan provocado la retracción de sus poblaciones en el país.
En 2019, arribó Alondra, la primera hembra de la especie incorporada al proyecto, donada por el Zoológico de Budapest. Fue trasladada al primer corral de pre-suelta diseñado especialmente para alojar ejemplares de la especie. A finales de 2019, se incorporó al proyecto Coco, un macho donado por el Zoo de Givskud, Dinamarca. Allí, ambos reciben diariamente peces nativos de la zona, que son ofrecidos vivos con el fin de que puedan practicar sus técnicas de pesca. Se espera que pronto ambos puedan sacar adelante una camada de cachorros y formen un grupo familiar, que será posteriormente liberado.
Con el material donado por Ternium en esta nueva etapa, se construyó un segundo corral en San Alonso de 40 x 20 metros, para recibir a la segunda pareja de nutrias gigantes, junto con infraestructura complementaria. También en Iberá, se está aguardando la aprobación de la Administración de Parques Nacionales para poder ampliar el corral de yaguareté.
Por otro lado, el proyecto en El Impenetrable busca mejorar la seguridad alimentaria y fomentar el emprendimiento local a través de la producción agrícola familiar. En esta iniciativa el acero fue necesario para construir seis gallineros de 10 x 10 metros. El objetivo es que las familias puedan ser autosustentables y que, en un futuro, puedan generar emprendimientos vinculados al turismo que complementen la oferta que tendrán los parajes de alrededor del parque.