El ministro de Economía, Sergio Massa, llegó este fin de semana a un acuerdo con dirigentes sindicales de la Confederación General del Trabajo (CGT) para dar un "alivio fiscal" a unos 600.000 trabajadores que pagan el Impuesto a las Ganancias.
En concreto, el Gobierno anunció que quedarán afuera del pago los adicionales de convenio, lo que implicará una mejora salarial de bolsillo de hasta el 16%, según el rubro en el que trabaje cada empleado.
Los conceptos que ya no serán gravados serán los bonos por productividad, fallo de caja y conceptos de similar naturaleza; la movilidad, los viáticos y otras compensaciones análogas; las horas extras, los adicionales por turno rotatorio y similares, informaron en el Palacio de Hacienda.
Este lunes se oficializa que los adicionales y otros conceptos no estarán alcanzados por el Impuesto a las Ganancias. En San Nicolás, más de 3.000 trabajadores serán beneficiados por el alivio fiscal.
La medida era uno de los principales reclamos de la dirigencia sindical, que está presionada por sus bases por la inflación. En este contexto, el techo de 60% a las paritarias quedó desactualizado y son cada vez más los gremios que negocian revisiones incluso bimestrales, como la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).