No sólo el sábado comenzó con lluvia, sino que terminó también con precipitaciones. El mejoramiento de la jornada no alcanzó y llevó a la tradicional cena de Nochebuena bajo techo.
Las últimas horas de luz estuvieron enmarcadas por nubarrones que fueron cubriendo el cielo, y enseguida la lluvia.
De manera intermitente, y hasta entrada la madrugada se sucedieron empañando las distintas fiestas que se preparaban para la llegada de la Navidad.
Los que apostaban a los recreos a cielo abierto para el festejo del 25 tuvieron que buscar otras alternativas y evitar el barro producido.
Cultura Ternium: gala solidaria a beneficio de Manos que Dan