Por Nicolás Pastocchi
Los sueños están para cumplirse. Y en ese camino, la médica veterinaria Florencia Armoa consiguió completar uno de los suyos. Hace algunos años completó los 42,195 kilómetros en New York y ese fue el puntapié inicial, después llegaron Chicago, Berlín, Londres y en los últimos 40 días, finisher en Tokio, cerrando el círculo de las “Seis Grandes” ayer en Boston.
“Estoy emocionada, fue una carrera muy linda. Cumplí el sueño de cualquier corredor”, sentenció Florencia luego de recibir la enorme medalla por completar ese logro. Enseguida, explicó cómo fue la competencia: “Un día horrible, viento en contra, diluvió y el terreno era bastante ondulado. Pero salí a disfrutar, tranquila porque no quería arriesgar nada, tenía mucho en juego”.
La que se disputó ayer, fue la edición 137° de Maratón de Boston, un pedazo de historia en el atletismo y de esta forma lo grafica Flor: “Fui disfrutando los paisajes y el aliento de la gente, que a pesar del día que hizo estuvo todo el recorrido empujando. Se corre por las afueras de la ciudad, un lugar muy campestre, donde la gente hace la famosa Barbacoa y sale de su casa a alentar, todo a pesar de la lluvia”.
De esta forma, para nuestro atletismo fue un día histórico. Florencia Armoa se convirtió en la primera nicoleña en completar el “Six Majors”, aunque promete no ser la última. En Boston también fue finisher Marité Tortul, que de esta forma culminó su quinta grande, restándole solamente Tokio. Dos atletas de nuestra ciudad, una completó su leyenda y la otra quedó a un solo paso.
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