Según un relevamiento de la consultora LCG, la inflación de julio en la primera quincena registró un aumento promedio de 2,3% en los precios de los alimentos, entre los que se destacan los incrementos en las bebidas, que pasaron la marca del 9% en el último mes.
Por otro lado, el estudio de LCG también calculó que, con estos números, la tercera semana tuvo una aceleración de 0,5 puntos porcentuales respecto a la anterior, en el marco de una sumatoria del 4,2% promedio en la inflación de julio.
De todas formas, el sondeo resaltó que la inflación mensual marca una desaceleración, debido a que se acumula una baja de 4,7 puntos porcentuales respecto al pico de principios de mayo, en el que se sumó un 42,2% de variación en los precios de 2023.
Así, el informe de la consultora registró que en las últimas cuatro semanas, siete de las diez categorías que relevaron mostraron incrementos promedio de 4,2% y 4,4% en comparación a la medición del mes anterior.
En detalle, el análisis semanal marcó que la inflación de julio subió, en la tercera semana, con el aumento del 8,3% en las bebidas e infusiones en esos días, otro 5% en las verduras, un 4,1% en los condimentos, otro 2,1% en el azúcar y en los panificados.
Sin embargo, según el sondeo de la consultora, las subas moderadas en las carnes y la baja de los precios en las frutas hicieron que el índice mensual de la inflación de julio bajara y se compensó el abrupto salto de las bebidas e infusiones.
De esta manera, en su tercera semana, la inflación de julio marcó un 9,8% de suba en bebidas, un 7,3% en el azúcar, un 7% en lácteos y huevos, un 5,9% en condimentos y un 5,9% en productos derivados del trigo como el pan, los cereales y las pastas.
En esa línea, las verduras acumulan un 5,8%, el aceite un 4,5%, las carnes un 1,1%, las comidas para llevar un 0,4%, y las frutas marcaron una baja de sus precios en un -2,9%, el registro que, según LCG, logró que se compensara el promedio de la inflación de julio.