Según el Indec, la inflación de enero fue de 20,6%, afectada aún por el arrastre de la devaluación del mes pasado y la política de liberalización de precios impulsada por el gobierno de Javier Milei. En 12 meses, los precios subieron 254,2%.
La inflación interanual sigue siendo la más elevada desde abril de 1991 (267%), mientras que el número mensual se halla sólo por debajo del que se vio en el país en febrero de ese mismo año (27%).
Se trata del primer índice de precios puramente bajo de la gestión libertaria, ya que el pico de diciembre (25,5%) fue compartido por ambas gestiones.
La división de mayor aumento en el mes fue Bienes y servicios varios con un 44,4%, producto del incremento en artículos de cuidado personal. Le siguieron Transporte con un 26,3% , por alzas en transporte público y el arrastre del aumento de combustibles y Comunicación con un 25,1%, por la suba en servicios telefónicos y de internet.
El capítulo con mayor incidencia en todas las regiones fue el de Alimentos y bebidas no alcohólicas con 20,4%. Al interior de la división se destacan las subas de Carnes y derivados y Pan y cereales.
El mercado esperaba para enero una inflación en torno al 20%. Por caso, en el primer Relevamiento de Expectativas (REM) del año, quienes participaron de la encuesta del Banco Central (BCRA) habían estimado una inflación mensual de 21,9% para enero.
La fuerte suba de los precios cercenaron los salarios de los argentinos, que el año pasado crecieron -según datos del Indec- un 152,7%. Los sueldos ya se encuentran en niveles equivalentes a los de 2005.
En tanto, las jubilaciones aumentarán, con la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Kirchner aún vigente, sólo un 30% desde marzo, con una inflación proyectada que supera ampliamente el 50% para el primer trimestre.
Fuente: La Nación