Tras la amenaza de un paro por tiempo indeterminado que iba a comenzar el lunes pasado en la planta de Acindar de Villa Constitución, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) anunció que se llegó a un acuerdo salarial, que permitió levantar las medidas de fuerza.
Las negociaciones en el sector de la siderurgia vienen complicadas desde hace varios meses, pero el conflicto además se disparó por el anuncio de unas 100 cesantías.
Después de una serie de reuniones con representantes de la compañía, que se aceleraron el fin de semana, la seccional Villa Constitución de la UOM informó que se acordó que "se estará blanqueando, en concepto no remunerativo a fin de mes (en el recibo de julio) con un ítem a cuenta futura paritaria, un 107% neto de incremento".
Apuntó que en los próximos días "se abonará un adelanto que será de 300.000, 500.000 y 700.000 pesos, teniendo en cuenta la situación particular de referencia de salarios y personales (embargos)”.
Y agregó que hay un compromiso con la empresa para "explorar antes del blanqueo de lo adelantado, distintas alternativas legales y contables para que no impacte o lo haga de la menor manera posible, en el impuesto a las ganancias, sobre todo por el periodo previo a su reinstalación".
A partir de esta semana comenzarán las asambleas para explicar los detalles del acuerdo, anunciando que a raíz de estas negociaciones se resolvió levantar la medida de fuerza que amenazaba con paralizar totalmente las actividades en la planta.
En cuanto al plan de suspensiones, Acindar indicó que la idea no es detener la producción más allá de las paradas que ya se realizaron.
La compañía pretende reducir los costos laborales frente a la caída de ventas -que es del orden del 45%-, la acumulación de stock frente a la recesión y la parálisis de la obra pública. Además, están abiertos los retiros voluntarios, a los que ya se sumaron varios empleados.
A esto, los voceros de la patronal agregaron que "las suspensiones afectan a 450 operarios bajo convenio", pero aclararon que "no van a durar todo el tiempo de la parada, sino que se efectuarán en forma rotativa para que impacte lo menos posible.
Las fechas de las paradas no son las mismas para todas las plantas ni para todas las etapas del proceso productivo.
En datos duros, la firma anunció que tuvo que reducir de 1,2 millones de toneladas anuales a 600.000 con una plantilla de 2.600 trabajadores en forma directa, entre personal de planta, más otros 2.000 contratados. Con estos números se explicaría la situación de conflictividad en la actividad.