Este miércoles 4 de septiembre finalizará el plazo para inscribirse al Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), sistema con el cual los usuarios que son beneficiarios de la tarifa social podrán recibir más descuentos en sus boletas de luz y gas.
En ese sentido, las personas que se hayan inscripto en ocasiones anteriores deberán actualizar sus datos siempre y cuando su situación de ingresos haya cambiado desde la última vez que solicitaron ingresar al RASE.
En rigor, para solicitar el RASE el Gobierno nacional pide el número de medidor, el número de cliente/servicio/cuenta/contrato o NIS de la factura de gas y luz, el último ejemplar del DNI, el número de CUIL de cada mayor de edad que reside en la vivienda, los ingresos de cada uno, y una dirección de correo electrónico.
El trámite, se realiza por la página oficial de la Secretaría de Energía de la Nación (www.argentina.gob.ar/subsidios), que suministra el formulario de registro del RASE en el que se exigen todos los datos mencionados anteriormente.
Al completarlo, la web otorga un código de confirmación que se debe guardar para tenerlo como comprobante, y para poder seguir la evolución del pedido desde MiArgentina.
Como el formulario opera como una declaración jurada, el Gobierno nacional advierte que aquellos que soliciten el RASE no podrán “omitir ni falsear ningún dato”, y adelanta que verificará la veracidad de la información a través de diversas fuentes antes de otorgar el beneficio, para garantizar la precisión de la misma.
Teniendo en cuenta que la luz y el gas son dos de los principales segmentos que más sufren los aumentos mensuales, se espera una amplia ola de formularios para ingresar al RASE debido a que la pérdida de subsidios impacta de lleno en boletas que ya vienen siendo golpeadas por la inflación desde hace rato.
Cómo se aplicarán los subsidios del RASE
Tal como funcionan políticas de subsidios de este estilo, los beneficios del RASE serán repartidos según los ingresos de cada hogar, que se dividen en tres niveles: altos, medios y bajos.
Los ingresos altos, son las casas que perciben mensualmente montos equivalentes o superiores a 3,5 canastas básicas para un hogar tipo 2 ($282.579), según las mediciones que realiza el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INDEC).
Asimismo, se tratan de viviendas que tienen 3 o más vehículos con una antigüedad menor a 5 años, que tienen 3 o más inmuebles, o que tienen una embarcación y/o una aeronave.
En esta línea, los hogares de Patagones (Buenos Aires), Chubut, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz o Tierra del Fuego deberán registrar ingresos mensuales superiores a 3,5 canastas básicas, más el 22% de beneficio impositivo que establece la Ley 23.272.
Los ingresos medios, son las viviendas que tienen ingresos mensuales entre 1 y 3,5 canastas básicas y que tengan hasta 2 inmuebles y más de un vehículo con menos de 3 años de antigüedad. Dentro de este segmento, son excepciones los hogares con uno o más individuo(s) con discapacidades, si así fuere, los ingresos mensuales irán de 1,5 a 3,5 canastas básicas.
Por último, entran en “ingresos bajos” las casas que tenga registros económicos mensuales menores a una canasta básica total, es decir $282.579; que tenga hasta un solo inmueble y que no posea ningún vehículo con menos de 3 años de antigüedad.
Además, serán incluidos en esta categoría las viviendas que tengan una o un integrante con Certificado de Vivienda expedido por el ReNaBaP, una o un integrante del hogar posea Pensión Vitalicia a Veteranos de Guerra del Atlántico Sur, y/o una o un integrante con Certificado Único de Discapacidad (CUD).