El ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, confirmó que se detectaron cuatro nuevos casos de sarampión y, de esta manera, ya suman ocho en toda el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
El dato se da en medio de la advertencia de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que emitió una alerta epidemiológica debido al aumento de casos en varios países de la región de las Américas.
Y puntualmente en la Argentina, se da en un contexto en donde varios médicos que se desempeñaban en los programas de VIH, lepra y tuberculosis renunciaron a sus cargos en el Ministerio de Salud.
En este contexto, Kreplak confirmó los cuatro nuevos afectados y llamó al Gobierno de Javier Milei a “invertir los recursos necesarios para contener el avance” de la enfermedad.
“Los nuevos casos corresponden a una persona adulta, sin registro de vacunación, a un bebé menor de un año, y dos adolescentes de 16 y 19 años con antecedentes de vacunación. Todos vinculados a la cadena de transmisión del primer caso”, detalló en redes sociales.
El funcionario bonaerense explicó que “en la zona de residencia de estos casos ya se realizó el control de foco y bloqueo para identificar los contactos y evitar nuevos contagios”, pero advirtió que “con estos ocho casos de sarampión la situación se vuelve cada vez más difícil”.
Sostuvo que “necesitamos con suma urgencia un Estado nacional que pueda tomar la conducción e invertir los recursos necesarios para contener el avance”, señaló.
Hace un mes, luego que se confirmara un cuarto caso dentro del territorio porteño, desde el Gobierno provincial iniciaron una campaña de sensibilización y vacunación con una dosis extra de la vacuna para las personas que tuvieron contacto con los casos en CABA.
Deben recibir la dosis extra, niños de 13 meses a 4 años que hayan tenido contacto con casos confirmados.
En tanto, bebés de 6 a 11 meses que fueron contactos de casos confirmados deben recibir una dosis extra denominada “cero”, que no cuenta para el esquema de vacunación regular, pero refuerza su inmunidad en este contexto.
Aunque la primera dosis de la vacuna triple viral tiene una alta tasa de efectividad, un pequeño porcentaje (entre el 5% y el 10%) de la población no responde adecuadamente, lo que los hace vulnerables al sarampión.
En bebés de 6 a 11 meses, la respuesta a la vacuna puede ser insuficiente debido a su edad temprana, lo que justifica la aplicación de una dosis adicional para generar inmunidad.