Se repiten los conflictos familiares con violencia de género. La intervención policial primero y de las instituciones dedicadas a la problemática después, requiere de un tratamiento especial con las reservas de las circunstancias para preservar la integridad de los involucrados.
Un aviso al 101 Emergencias Policiales, da cuenta de un conflicto familiar violento en Morteo al 600. Personal del CPC se presenta en el lugar, y encuentra a un joven de 20 años de edad, el cual se encontraba fuera de sí y con cortes en uno de sus brazos. Su madre manifestó que las mismas se las autoinflingió, luego de una crisis de nervios, ocasionando disturbios y daños en la vivienda.
La mujer indicó que además en el intento de calmarlo la habría golpeado.
Cuando los uniformados, intentan identificarlo el joven se torna hostil y violento. Al no acatar las órdenes de los policías, empujándolos e intentando golpearlos , mediante el uso de la fuerza mínima fue reducido y trasladado a Comisaría Primera.
Tomó intervención la UFI Nº 3 en turno.
Una situación de características propias a los delitos de índole privada se dio en barrio 9 de Julio.
En la madrugada del sábado personal del CPC fue comisionado por el 101 Emergencias Policiales a un domicilio de calle Acevedo al 800.
En el lugar proceden a la aprehensión de un individuo de 50 años, quien al momento de la presencia policial se resiste y debió ser reducido.
Su esposa manifestó que el mismo la había agredido físicamente y psíquicamente.
El hombre fue remitido a la comisaría Segunda, y la mujer acompañada a la comisaría de la Mujer para su contención.