Ese es el nombre que eligió el periodista Alejandro Andrín, para bautizar al libro que atesora entre sus páginas la vida de un hombre tan memorable como lo fue el nicoleño Cayetano Cavalli.
La presentación tuvo lugar este sábado 23 de junio en la librería “El Buen Libro”.
Concebido en el corazón de la familia de Cayetano Cavalli, el sueño de escribir su historia fue depositado en manos de Alejandro Andrín quien tras un vehemente trabajo pudo hacerlo realidad a 60 años del aniversario de su fallecimiento.
Como no podía ser de otra manera, un importante número de personas le dieron la bienvenida a esta obra, por tratarse de la historia de un ciudadano comprometido con el desarrollo industrial de San Nicolás y por sobre todas las cosas, de un hombre como pocos.
En la oportunidad, se hicieron presentes, entre otros, el Presidente del Concejo Deliberate, Andrés Quinteros; el Director de Museos, Santiago Chervo y el Director de Cultura, José Petrucci.
El acto inició en el marco de una cálida mañana invernal. Las palabras de Julián Cavalli, nieto del homenajeado, dieron inicio a una serie de momentos que movilizaron las lágrimas de los presentes.
Este joven trabajó junto a Andrín y tuvo bajo su responsabilidad escribir las palabras que darían forma al Prólogo del libro. Reconoció que este trabajo le permitió conocer mucho más a su abuelo y se mostró complacido con lo logrado. “Ha sido un trabajo serio y riguroso”, expresó.
Luego se dio lectura al Decreto 39 del Honorable Concejo Deliberante que declara de interés municipal el libro “Cayetano Cavalli: Visionario y realizador”.
Entre sus consideraciones narra acotadamente los mayores aportes de este hombre a nuestra sociedad: “Cayetano María Cavalli fue considerado por distinguidos nicoleños como un prototipo de ciudadano ejemplar con incansable vocación de servir. Como gerente del Banco Español del Río de La Plata se transformó en una figura fundamental en la articulación de la faz financiera, como en la comercial e industrial. Cavalli conformó, también, junto a otros importantes nicoleños la Comisión Pro Radicación de Industrias desde donde promovió la legada de empresas y fábricas en nuestra ciudad que le dieran el impulso económico y social que necesitaba. Fue además presidente del Club Belgrano durante más de 23 años durante cuya etapa que el club vivió de mayor expansión”.
Por último, para fundamentar la necesidad de declararlo de interés municpal, el decreto expresa: “El libro Cayetano Cavalli: Visionario y Realizador cuenta con una exhaustiva investigación y documentación aportada por la familia Cavalli que aporta contenidos historiográficos de importancia para nuestra ciudad. Y que finalmente, rescatar una figura tan abiertamente aceptada como la de cCavalli y en la oportunidad del sexagésimo aniversario de su fallecimiento supone renovar el compromiso por los valore de justicia, trabajo y solidaridad”.
Tras la lectura del mismo, se le obsequió al reconocido Ing. Francisco José Grasso una imagen del terreno que adquirió junto al Ing. Buitrago donde años después se emplazaría SIDERAR. El Director de Cultura, José Petrucci puso esta foto en manos del Ing. Grasso.
Por su parte, el Presidente del Concejo Deliberante, Andrés Quinteros le entregó a la presidente del barrio Cavalli, Nilda Coronel libros para que los habitantes de esa zona puedan conocer la obra del hombre cuyo apellido lleva ese lugar. Quinteros dijo que estos homenajes valen más que ponerle el nombre a una calle o a un barrio.
Los presentes también pudieron disfrutar de un documental que resume parte de la historia de Cavalli.
Finalmente, el autor de dicha obra pronunció un conmovedor discurso. “El aliento que a uno inspira es que el libro pueda dar con su lector. Este misterioso encuentro que sólo a veces se acerca a la belleza. Esa sensación es la que me sostuvo muchas veces. Pensar amorosamente en el lector”, expresó Alejandro Andrín.
En su alocución agradeció a todas aquellas personas que hicieron posible la obra y aquellos que se mantuvieron a su lado alentándolo en la realización del mismo. Un agradecimiento especial mereció el periodista y escritor Javier Tisera, quien brindó su “desinteresado aporte”.
Andrín narró que “cuando en 1951 se termina de construir la pileta de natación del Club Belgrano invitaron a su presidente, Cayetano Cavalli, a que dejara impregnada su manos en el cemento de la vereda del natatorio. Cuando yo tenía 5 años uno de los primeros recuerdos que conservo era que iba y ponía mis manos de chico sobre esas inmensas manos. Recorría divertido con mis diminutos dedos esa geografía. Lo hacia obviamente sin saber que mis manos escribirían muchas años mas tarde un libro sobre su vida”.
El autor también reconoció que “este libro no hubiera sido posible, siquiera posible de ser imaginado sin la decisión, vocación y amor de Pablo Cavalli, hijo de Cayetano, a él mi agradecimiento”.