En la tarde de jueves se constituyó una importante comisión de la Brigada de Investigaciones a un domicilio de calle Olleros 353, con la certeza que allí se escondía uno de los delincuentes más temidos y peligrosos de los últimos tiempos. Se trata de Cristian Daniel Herrera, un joven de 32 años que pasó más tiempo de su vida tras las rejas por matar, robar y abusar que en libertad.
Es el autor de tres robos calificados probados con resonancia en la ciudad.
El 27 de febrero sorprendió a un travestido en barrio la Loma con fines de robo y sin mediar palabra le disparó, hospitalizándolo en grave estado.
En el mes de marzo atracó a mano armada junto a un cómplice el Sindicato de Canillitas previo manosear a la empleada en un cuarto trasero, y alzandose con un abultado botín de $35.000.
Luego ingresó a un domicilio de barrio Fraga pateando la puerta del frente y vistiendo un chaleco antibalas policial. Simuló realizar un allanamiento y desvalijó la vivienda en horas de la madrugada mientras el matrimonio descansaba.
La fiscal Dra. Verónica Marcantonio estuvo a cargo de la minuciosa investigación. Requirió la presencia tanto del jefe de la DDI Com. Mayor Hugo Mauriño como de todo su personal para realizar decenas de allanamientos a diario para dar con el delincuente.
Herrera distraía a los hampones huyendo de domicilios que visitaba solo horas y luego escapaba.
De acuerdo al material recogido por EL INFORMANTE en el lugar se pudo saber que Cristian Herrera purgó una condena por Homicidio hace más de 12 años atrás. Mató junto a un compinche a un hombre por Paván y Olleros apenas siendo mayor de edad y el Fiscal Ariel Tempo lo llevó a juicio y logró una condena de 18 años. Tiempo antes de cumplirla recuperó la libertad por orden judicial.
También participó en resonantes casos de robo y abusos.
Algunos lo definen como un delincuente sin códigos, cuyo gusto preferente fue la conocida “mexicaneada”, por lo que es poco querido en el ambiente delictivo. Con una lágrima tatuada en su mejilla, y todo su cuerpo pintado con dibujos que marcan su atribulado y mustio pasado, pasará sus próximos días a la sombra.
A las 17 hs un importante número de agentes de la DDI con el apoyo del GAD lograron dar con Herrera que en las últimas horas utilizaba de aguantadero la vivienda de un conocido. Había arribado la noche anterior y no pasaba más de un día en el mismo lugar.
El Instructor judicial Dr. Francisco La Torre bajo las instrucciones de la Dra. Marcantonio, acompañó cuidadosamente las diligencias.
En las próximas horas se conocerán los ribetes de la investigación, que requerirá de una segunda crónica periodística.
Por lo pronto a Herrera lo aguarda un proceso y un juicio oral para poder condenarlo por las calamidades cometidas que ya estarían debidamente probadas.
Fotos 1,2,3 y 4: El momento de la aprehensión de Herrera y posterior traslado.
Foto 6: Com. Mayor Mauriño, Instructor Francisco de la Torre y Com. Mendez.
Homenaje a Raúl Carnota a beneficio de la Casa de la Música