Se inició una serie de contactos de manera informativa para la redacción de una Ordenanza que atienda la práctica deportiva médicamente controlada. Específicamente con los riesgos de sufrir muerte súbita.
La secretaría de Salud Pública, con sus equipos técnicos, preparó un Proyecto de Ordenanza que contiene los alcances de un Certificado Médico y Consentimiento Escrito, para la práctica de deportes competitivos que demanden esfuerzo físico y tensión psíquica.
El Dr. Luis Padulo, secretario de Salud Pública, pudo expresarles a los representantes de las entidades sociales y recreativas el alcance de una iniciativa que quiere dar mayor seguridad a los deportistas y por extensión al público que asiste a las competencias.
Es sabido que para la práctica de cualquier actividad física, pero más para las deportivas y las competitivas, se requiere de un cuidado del cuerpo y de la mente.
Cada persona debe estar controlada a la altura de las exigencias y de los objetivos que quiera alcanzar con la actividad física.
Y si así no fuera, se tienen que instrumentar las herramientas necesarias para que los clubes deportivos, las instituciones civiles, los organizadores de cualquier actividad masiva, puedan exigir a los deportistas estos mínimos requerimientos.
Pero la iniciativa es superadora entendiendo que además de la tranquilidad de los deportistas y los organizadores, el público debe saber que está cubierto ante la posibilidad de una indisposición física, como puede ser la muerte súbita.
La toma de conciencia es para todos.
Con una consulta al médico, que pondrá el parámetro de profundidad de los estudios, y el consentimiento escrito, los riesgos son asumidos responsablemente.
Y además se propicia que haya en todos los lugares donde se convoque gente, personas capacitadas en RCP. Una esencial maniobra a la espera de la ayuda médica, fundamental para salvar una vida.
Estos conceptos estarán contenidos y reglamentados en una Ordenanza que se espera se pueda comenzar a aplicar el año próximo.
Fabiana Cantilo se presenta en el Teatro San Nicolás