A la medianoche los automovilistas apuraban el cargado de sus tanques ante desganados playeros que iniciaron un paro por 24 horas. El paro tiene un acatamiento total en la ciudad.
La medida es convocada por los trabajadores de las estaciones de servicio, pero cuenta con el respaldo de los propietarios de esas bocas. Las petroleras no se han opuesto a la actitud gremial. El paro es por cuatro reclamos. Uno lo ponen los empleados: continuidad de los puestos de trabajo, en un escenario de cierres de estaciones y despidos. Los otros tres son asuntos empresarios: abastecimiento completo de combustible a todas las estaciones; renovación automática de los contratos con las petroleras cuando se vencen; y más rentabilidad en el negocio.
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