El campo volvió este martes a las rutas para manifestar sus reclamos al gobierno nacional en un contexto de sequía.
El lugar elegido fue a la vera de la autopista Rosario-Buenos Aires, en el acceso a la localidad santafesina de Villa Constitución, donde las cuatro entidades de la mesa de enlace (SRA, FAA, Coninagro y CRA) convocaron a la primera protesta del sector desde que Sergio Massa asumió en el Ministerio de Economía acompañado por Juan José Bahillo en la Secretaría de Agricultura.
Sergio Olego, de Federación Agraria Argentina (FAA) Ramallo, aseguró que tiene “pocas expectativas” que el gobierno pueda darles una respuesta satisfactoria tras la asamblea.
“Pero no hay que bajar los brazos, tenemos que pelearla, no queda otra. De la sequía no tiene la culpa el gobierno, pero el problema es lo que viene pasando desde hace años. La presión impositiva, las retenciones y la falta de acceso al crédito. Tendría que haber un financiamiento a tasa cero, para que las cooperativas puedan seguir el próximo año”.
“En Ramallo, los maíces de primera desaparecieron, y de segunda hay sembrados pero es muy posible que los agarre la helada. La soja que se sembró en enero está prácticamente perdida, porque hace un mes que no llueve. Y las de primera se están destruyendo ahora, no vamos a sacar ni siquiera 20 quintales. Va a ser un año, prácticamente, sin cosecha”, alertó.
Por último, Mario Iparraguirre de la FAA Ramallo, afirmó: “La situación es complicada. Está castigando tanto el tiempo como el gobierno. La intención nuestra es que nos escuchen un poco más, que se acuerden un poco más de nosotros”.
En su caso, contó que trabaja en tierras propias y arrendadas. “Producir en campo alquilado está complicado, ahora tenemos que hablar con los dueños para ver cómo seguimos”.