Desde hace unos años, el ente Aguas de San Nicolás viene trabajando en la implementación de un sistema de medición del consumo de agua potable a fin de obtener información sobre el sistema y poder tomar decisiones que mejoren el servicio.
En total, se instalaron más de 2.200 medidores, principalmente en comercios. En función de los registros, se inició un plan integral para asegurar el correcto abastecimiento a todos los barrios, mejorando el caudal y la presión.
Uno de los datos que llamó la atención en este proceso, fue la detección de consumos muy elevados en algunas propiedades, principalmente comercios, donde el nivel de consumo es hasta 10 veces más de lo estipulado por los estándares internacionales y las recomendaciones de la OMS.
Para tomar referencia, el estándar de consumo en comercios como panaderías es de 50m³ por mes. Sin embargo, hay casos entre los medidos en San Nicolás donde el consumo es superior a los 500 m³ mensuales.
Es por ello que Aguas de San Nicolás comenzó a notificar a estos domicilios a fin de que reduzcan sus consumos, bajo la premisa de que, en caso de no regularizar la situación, pasarán a pagar el excedente a partir del mes próximo.
Cabe aclarar que los valores normales de consumo son de 20 m³ mensuales para un domicilio residencial, mientras que para los comercios con uso intensivo del agua se considera un piso de 50 o 120 m³, según el rubro.
“En esta primera etapa estamos informando a aquellos casos en los que detectamos un abuso en el consumo de agua. Es decir, aquellos donde el nivel de consumo es el doble de lo estipulado. Incluso hay casos donde llega a ser 10 veces más de lo permitido”, comentó el presidente de Aguas, Gonzalo Tramontín.
La obtención de información es clave también para trabajar de manera preventiva ante acontecimientos particulares como la detección de pérdidas ocultas en instalaciones domiciliarias.
“Es probable que aquellos domicilios donde el consumo es tan alto sea porque tienen pérdidas internas que no han detectado, pero también nos hemos encontrado con malos hábitos y acciones de derroche que no podemos permitir si queremos cuidar el recurso”, concluyó.
Además, informó que durante el próximo semestre se continuarán instalando medidores en nuevos domicilios, con el objetivo de cuidar el recurso y brindar un mejor servicio.